INGREDIENTES:
30 o 40 galletas María
80 gr de margarina, 1 c/c de licor
3 huevos
200 gr de azúcar
250 gr de nata para montar
300 gr de frambuesas frescas
1 sobre de gelatina en polvo de frambuesas
Preparación:
Primero preparamos la base, trituramos las galletas, pongo dos
cantidades por que depende el molde que uséis y si os gusta la base más o menos
gordita, después mezclamos con la margarina derretida que podemos hacer unos
segundos en el microondas. Si os gusta podéis poner unas gotas de licor a la
mezcla. Ponemos la pasta en el fondo del molde para tartas desmontable, (en los laterales, no) apretando con
los dedos. Reservamos en la nevera.
Aparte, trituramos las frambuesas en una batidora potente, con 100 gr
de azúcar, colamos el puré para que no tenga ninguna pepita. Lo ponemos en un
cazo, a fuego lento, y cuando esté caliente añadimos la gelatina sin parar de
mover hasta que esté bien disuelta, podemos hacerlo con unas varillas, retiramos
del fuego y dejamos que se enfríe. Reservamos.
Por otro lado, batimos la nata, que debe estar muy fría. Reservamos en
la nevera.
Separamos las yemas de las claras, batimos las claras a punto de nieve
firme. Reservamos en la nevera.
Batimos las yemas con los 100 gr de azúcar que nos quedan, hasta que estén bien integrados y la mezcla
tenga un color blanquecino. Añadimos el puré de frambuesas en el que hemos disuelto
la gelatina, seguimos moviendo hasta que todo esté bien mezclado.
A continuación añadimos la nata montada que teníamos reservada, con
movimientos envolventes, y por último las claras a punto de nieve que tenemos
preparadas, esto lo hacemos en tres veces, tratando de mover con mucho cuidado,
también con movimientos envolventes para no perder el aire y que la mousse no
se nos baje.
Sacamos el molde de la nevera donde hemos puesto la base de galletas,
vertemos la mezcla anterior y la volvemos a meter para que se cuaje.
Tardara unas 4 horas mínimo, a mi me gusta hacerla de un día para
otro, así me aseguro que ha cuajado bien.
A la hora de servir, la desmoldamos y adornamos a gusto, con nata
montada, frutos rojos….
Como veis en la foto, yo he optado por hacer una malla de caramelo
tintada de rojo.
Aunque la tarta tiene muy buena pinta, otras veces la he puesto en
copas y me gusta más, ya que a la hora de servir, no se deshace la decoración.
Cuando la puse en copas no hice foto, imaginación….a la hora de
decorarla.
La receta no es mía, la he adaptado un poco a mi gusto.
Menuda pinta tiene!
ResponderEliminarHola, guapetona. Me encantan las tartas tipo mousse y esta tiene una pinta divina. Estoy de suerte ya que tengo un matorral de frambuesas en la huerta, ya quedan poquitas.
ResponderEliminarMe alegro muchísimo de que os gustara la tarta tipo capuchino, es una de mis preferidas y siempre que la hago es un éxito (sobretodo para los cafeteros). Gracias por comentarme el resultado y por tus amables palabras.
Un beso.
Maria siento no haberte contestado en su tiempo, he tenido el blog que no funcionaba muy bien, ahora parece que va.....aunque hay seguidores que no pueden poner bien los comentarios.
Eliminargracias.